Sí, incluso la mujer mejor maquillada del mundo ha cometido alguna vez en su vida uno de estos errores en su intento por lucir espectacular. He aquí los pecados más comunes a la hora de maquillarnos, y por supuesto la lista de los mandamientos que nos harán libres.
1.- Limpiaras tu rostro cada noche.
Dormir con maquillaje o no lavar la cara antes de dormir es un crimen que todas hemos cometido alguna vez, pero hacer de esto un hábito traerá consecuencias terribles para nuestra piel. La irritación, las manchas, los poros abiertos y la piel agrietada son los castigos por no seguir este mandamiento. Al remover las impurezas del rostro, sean de maquillaje, smog, grasa, etc., permites a tu piel refrescarse y respirar. Si estás muy cansada para una limpieza completa, por lo menos quita el maquillaje con toallitas húmedas y un poco de aceite humectante.
2.- Usaras protector solar cada día.
Incluso si el día está nublado o no muy soleado, no olvides aplicar una buena capa de protector solar antes de salir de casa. Si no lo haces estás poniendo en riesgo tu piel, pues los rayos del sol siguen dañando tu piel y pueden provocar arrugas prematuras o cáncer.
3.- No te emociones con las pinzas de ceja.
Incluso un poco de emoción al momento de delinear tus cejas con las pinzas puede resultar en un desastre. Lo mejor es que el delineado de tu ceja lo haga un profesional, y posteriormente puedes hacerlo tu misma siguiendo el patrón que tu estilista ha definido. Si ya te ha pasado y no sabes cómo remediarlo, no te asustes: busca un color de sombra lo más parecido al tono de tu ceja y con un pequeño pincel rellena las zonas que desees para difuminarlas y hacerlas menos obvias. Cuando puedas, ¡corre al estilista!
4. Difumina, difumina, difumina.
Si estás de prisa, si no hay suficiente iluminación o simplemente no pones suficiente atención a la hora de difuminar la base del maquillaje, es muy fácil que termines con una línea en el contorno de tu cara, o lo que yo llamo “la máscara”. Toma el tiempo necesario para difuminar correctamente el maquillaje y recuerda que cuando hablamos de base de maquillaje: menos es más. Es mucho más fácil poner un poco más de maquillaje si te ha faltado, que tratar de remover el exceso, sobre todo si estás de prisa. Te aconsejo siempre comenzar poniendo menos de lo que crees necesario y utilizar una brocha gruesa para obtener un resultado más terso.
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